Segovia triplica la caída nacional de las ventas de coches

La caída nacional de ventas de coches se triplica en Segovia

Actualmente los clientes tienen muchas dudas sobre el tipo de vehículo que deben comprar y los concesionarios de Segovia triplican esta caída a nivel nacional. Las matriculaciones de vehículos eléctricos han aumentando un 26 % en España con respecto al 2021, pero en Segovia se reducen en un 28%.

En el caso de la Unión Europea se ha acelerado la desaparición de vehículos contaminantes, fijando el 27 de octubre de 2035 como el año en el que se prohibirá de forma definitiva la venta de nuevos modelos con motor de combustión como es el caso de los vehículos híbridos, diésel o de gasolina. El mercado automovilístico de Segovia no consigue superar sus expectativas, en el caso de las matriculaciones de todoterrenos y turismos se acumula una caída interanual del 23,09% entre enero y septiembre, el triple que la media nacional (-7,36%) y más del doble que la autonómica (-10,9%). En el caso de los híbridos aumentan, pero solo un 2,03%, cuatro y siete veces menos que en el conjunto de España (+8,17%) y de Castilla y León (+14,06%), respectivamente.

En el caso de la venta de eléctricos crece a nivel estatal (+26,02%) y regional (+34,95%), siendo en Segovia en la provincia en la que se reduce un 28,41%, por ello se ha convertido en la segunda provincia española de la península con menos puntos de recarga (31), únicamente por delante de Soria (26) y por detrás de otras como Zamora (38), Ávila (50), Toledo (85), Cuenca (34), Teruel (64) y Ourense (38). En la capital de la provincia, Segovia, el Ayuntamiento ha preparado una futura instalación de seis puntos más de carga que podrán comenzar a funcionar en el primer semestre de 2023.

Número de vehículos vendidos

En los primeros nueve meses del año, Segovia contabiliza 63 vehículos eléctricos matriculados frente a los 88 en la misma época del año. Además de un total de 866 turismos y todoterrenos con cualquier tipo de motorización, 260 menos que en el intervalo de 2021. Además, los vehículos de diésel y de gasolina han sufrido un desplome, mientras que en el caso de los alternativos prácticamente clavan las cifras del pasado año, ganando cuota de mercado con respecto al resto.

El sector del automóvil vende la mitad que en el último año previo a la pandemia en el caso concreto de Segovia y sufre las crisis que han surgido en los últimos años. Han sufrido las consecuencias económicas directas del Covid-19, la falta de microchips y la guerra entre Ucrania y Rusia. Las marcas asiáticas parecían que no sufrirían esta escasez pero la escalada energética y la inflación general se ha unido a la incertidumbre creciente entre los clientes que ya no saben que vehículo elegir. Las personas que circulan por la ciudad apuestan por los híbridos y los eléctricos. Las diferentes marcas planean dejar de lanzar los modelos nuevos de combustión unos cinco años antes de 2035.

¿Cómo ha influido la crisis de los microchips y la Guerra de Ucrania en este aspecto?

La escasez de materiales ha afectado de forma significativa al sector automovilístico en un momento en el que se necesita un mayor número de componentes. La mayoría de marcas quieren cumplir las exigentes homologaciones actuales en seguridad y emisiones, algo que finalmente será necesario para poder circular y comercializarse por vía pública. Por lo que, tal y como hemos dicho antes, la recesión económica y de movilidad creada por la pandemia puede explicar esta falta de chips. Las diferentes causas han contribuido a la Guerra entre Ucrania y Rusia, afectando de esta forma a los trabajadores.

Las diferentes marcas han reconocido la crisis mundial de componentes pero no todas sufren las mismas consecuencias. Los concesionarios buscan la máxima transparencia con el cliente para poder pactar sin problemas, eliminando problemas judiciales por el incumplimiento del contrato.

¿En qué se está notando más la escasez de materiales?

Desde diferentes puntos del planeta, han avisado que el magnesio supone una parte fundamental a la hora de fabricar un vehículo, por lo que si este material falta, tendrá que pararse también la producción a la larga. La industria del motor, además, da sólo en Europa trabajo directo a 2,6 millones de personas y de forma indirecta, ya que el mercado automovilístico da trabajo a cerca de 10 millones de personas en el viejo continente. Y es que las reservas de magnesio ya se están agotando aquí, por lo que se ve un panorama muy negativo en cuanto a escasez de suministros también en China.

Por ejemplo, ahora la mayor escasez de materias primas esenciales que se está dando para el aluminio utilizado en la fabricación de automóviles está amenazando con empeorar aún más esta situación, la cual está ya bastante tensa por lo poco que se puede ofrecer al consumidor. Y esto no sólo es para modelos únicos que tengan un chasis o una carrocería completa de aluminio, como pueden ser algunos modelos de Audi o Tesla. Esto influye a la hora de fabricar algo tan sencillo como una llanta de aleación o un disco de freno, los cuales tienen magnesio en su composición. Al igual que ocurre con los motores que no tienen un bloque de aluminio y tienen una culata de aluminio.

El mercado actual está muy paralizado y se prevé un invierno duro, debido a los precios de los carburantes y a la falta de piezas. Existen una gran cantidad de modelos que pueden tardar un mes o poco más, siendo el plazo de más de cuatro meses en algunos casos. En provincias pequeñas como Segovia el problema se agrava de forma exponencial.

Las marcas producen menos y existen diferentes problemas de suministro, siendo el vehículo eléctrico el que genera una pérdida importante de prestaciones en el caso de los viajes largos por ls paradas para recargar. En el año 2030, existirá una red de suministro mayor y las marcas prevén producir solo vehículos no contaminantes.

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