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Audi quiere que España sigua invirtiendo en infraestructura eléctrica
La marca alemana Audi confía en que España va a seguir invirtiendo en infraestructuras para la recarga de vehículos eléctricos con el principal objetivo de poder superar unas de las principales barreras de penetración de los vehículos eléctricos en el país de la Península Ibérica.
El Parlamento Europeo ha obligado a los países de la Unión Europea a instalar puntos de recarga eléctrica en la red de carreteras comunitarias cada 60 kilómetros.
Los eléctricos de Audi
En la segunda mitad de la próxima década se verán un gran número de coches eléctricos en España, una vez que se superen las barreras en materia de infraestructura de carga y también las unidas a la autonomía de los automóviles eléctricos, para que sean más accesibles para un gran número de consumidores y se comparen con los vehículos con motores de combustión.
A partir de 2026, todos los vehículos que lanzará Audi serán eléctricos y a partir de 2025, todas las plantas de producción de la marca alemana serán neutras en carbono.
Para 2025, la compañía habrá invertido alrededor de 18.000 millones de euros en su plan de electrificación de vehículos, una cantidad en la que no se incluye la inversión realizada en la digitalización de los diferentes automóviles.
Cadena de suministro
La ausencia de semiconductores provocada por la pandemia, ha hecho que se produjeran retrasos en las entregas de los vehículos. Pero la gestión de Audi hará que los clientes que están esperando su vehículo puedan obtenerlo lo antes posible.
Falta de puntos de recarga
En España faltan puntos de recarga para vehículos eléctricos y existe una evidente desigualdad territorial en la vertebración de infraestructura para recarga rápida de vehículos eléctricos.
¿Dónde hay más puntos de recarga en España?
La densidad de puntos de recarga se corresponde bastante bien con la poblacional, como ocurre también con infraestructuras tan dispares como fábricas, hospitales, zonas de tiendas, bibliotecas y piscinas públicas. La infraestructura se abarata cuando hay más gente en un lugar porque más gente la utiliza, diferenciando algunas desigualdades territoriales.
El grueso de los puntos de carga 69 % se encuentran en suelo urbano siendo 3760 puntos, mientras que 1162 están en áreas rurales y 1028 se ubican en carreteras principales y corredores. Sin embargo, cuando se analizan los cargadores rápidos, las cifras son diferentes ya que existen 134 en carreteras y corredores, 132 en áreas urbanas y 17 en áreas rurales.
Desigualdad territorial en los puntos de recarga
La baja densidad poblacional hace que el coste por persona sea elevado, por lo que la gente que vive en áreas dispersas ha de desplazarse más kilómetros para dar con esta infraestructura.
Como consecuencia de que los puntos de recarga se concentren allí donde vive más gente, se tiene como resultado que los habitantes ubicados fuera de los núcleos densos no pueden acceder a ellos. Así, en los corredores y carreteras principales 127 250 personas comparten un cargador de carga rápida, mientras que en urbano se comparte entre 237 265 personas y en rural, 293 080 personas.
La actual distribución de puntos de carga está condicionada por las estrategias comerciales de oferta y demanda siendo una forma de desarrollar la infraestructura que perjudica al medio rural que depende en gran medida del vehículo privado.
Medidas europeas
En la reunión de la Comunidad Política Europea, celebrada en Praga en la que participaron 44 países, todos los estados miembros de la UE y de otras naciones, como Noruega, Suiza, Turquía, Ucrania o Reino Unido, se ha acordado los planes del futuro para la movilidad sostenible, para afrontar la seguridad y la crisis energética que está produciendo la Guerra de Ucrania.
El Parlamento Europeo ha aprobado el despliegue de instalaciones de repostaje y de recarga para promover una movilidad sostenible. El objetivo es fomentar medios de transportes menos contaminantes, lo que afecta no solo a los vehículos pesados y a los automóviles sino también a los trenes y a los aviones.
Los eurodiputados acordaron imponer objetivos nacionales mínimos para el despliegue de la infraestructura para combustibles alternativos, por lo que los estados miembros tendrán hasta el año 2024 para poder presentar sus planes para conseguir los objetivos establecidos.
Para 2028 y cada 100 carreteras está previsto que se deben instalar estaciones de repostaje de hidrógeno.
La comunidad política que tiene por objeto fomentar la cooperación y el diálogo político para reforzar la seguridad y tratar cuestiones de interés común para fomentar la prosperidad del continente europeo. l
La mitad de los vehículos eléctricos de España se matriculan en la Comunidad de Madrid
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El programa «Moves III» está destinando más de 80 millones de euros en ayudas para la adquisición de estos vehículos y la instalación de puntos de recarga en la región.
El tercer programa “Moves” cuenta con una mayor inversión que sus predecesores, ya que en esta ocasión se ha recurrido a los fondos europeos Next Generation para conseguir llegar al mayor número de empresas y de particulares.
Para las furgonetas y camiones, las ayudas son de hasta 7.000 euros, 9.000 si se da el achatarramiento de otra unidad, en el caso de las ayudas para personas físicas alcanzan los 4.500 euros en el caso de los turismos, con la posibilidad de subir hasta los 7.000 euros con el achatarramiento de otros vehículos con más de siete años de antigüedad. Por último, en el caso de las motocicletas y los cuadriciclos el importe se sitúa entre los 1.800 euros o 2.000 euros si se da el achatarramiento. Además, el Plan Moves III contempla subvenciones del 10% para solicitantes que residan en municipios de menos de 5.000 habitantes, para las personas que presenten movilidad reducida y para los vehículos destinados a uso de taxi o VTC
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