Los coches de segunda mano aumentan el doble que los de renting
La compra de cualquier objeto actualmente supone un gasto muy superior al de hace un año, reflejado de forma muy evidente en los precios de los coches usados y nuevos. Las estadísticas y datos reflejan esta tendencia y no es solo una sensación de profesionales del sector y de los clientes.
Entre enero y septiembre el precio de los coches nuevos han aumentado un 11% con respecto al mismo periodo el año pasado al igual que los coches usados que se han encarecido un 19% de media. Por su parte los coches de entre 3 y 5 años son los que menos han subido el precio.
Aumento del precio de los coches de segunda mano
El mercado de ocasión parece estar llegando a una cierta estabilización de los precios que han marcado récords históricos provocados por la falta de stocks de los vehículos y la fuerte demanda, especialmente en los que cuentan con menos de cinco años.
Actualmente el coste medio por vehículo de ocasión ha aumentado hasta los 19.853 euros. Los coches de segunda mano han dejado de ser tan baratos, por lo que los automóviles pierden valor en el momento en que salen del concesionario.
¿Por qué los clientes se interesan por vehículos más antiguos?
Los clientes consideran que los vehículos con una mayor antigüedad son más baratos y requieren de menores trámites y esperas que los turismos nuevos. Esta tendencia de compra de la obtención de vehículos más antiguos y más contaminantes puede ser un hándicap para la transición hacia combustibles más limpios, debido a la antigüedad de los vehículos.
La incertidumbre económica hace que el consumidor retenga a su inversión y acuda con más intensidad al mercado de ocasión. Aunque para el consumidor puede no ser tan beneficioso debido a las legislaciones de las grandes ciudades.
¿Por qué los coches usados son más caros?
El problema principal al que se enfrenta el sector de los coches de ocasión provoca una serie de problemas a los que la industria del automóvil lleva enfrentándose como es el caso de la falta de stock, la escasez de materias primas, el encarecimiento del transporte y la energía.
La falta de stock hace que las empresas y las flotas tengan una serie de problemas para poder renovar sus vehículos. Además, una gran cantidad de usuarios han descartado la compra de un vehículo nuevo por los largos tiempos de espera existentes debido a la crisis de los microchips existente, haciendo que la oferta de coches de segunda mano sea escasa, encareciendo de esta forma los precios.
Crisis de microchips
La crisis de suministro de microchips ha supuesto una gran crisis en el sector de las empresas de renting y del automóvil, ya que no han sido ajenas al problema. La falta de este tipo de componentes ha incrementado las condiciones y los precios de compra tan beneficiosos con las que negociaban antes las empresas con las marcas se han visto reducidas. La crisis producida sumado al precio del impuesto de matriculación ha repercutido en las cuotas de los usuarios.
La Guerra entre Ucrania y Rusia podría provocar que el suministro de materiales que llegaban de Ucrania, como es el caso de los cables, pudiera volver a parar la producción, siendo un grave problema para el sector automovilístico y para las empresas de renting en particular. En 2023 según las previsiones más optimistas podría finalizar la crisis de desabastecimiento de microchips.
En el caso de las compañías de renting que se han tenido que enfrentar a esta situación han tenido que buscar una serie de soluciones para poder mantener las diferentes flotas activas a la espera de nuevos vehículos, optando por la prolongación de los contratos que se encontraban en vigor.
Nuevo pensamiento
En los últimos años los pequeños negocios de renting han aumentado su notoriedad al igual que los autónomos y particulares haciendo que se convierta en uno de los impulsores del sector. En la actualidad, el segmento de vehículos que tiene una mayor representación sigue siendo el de los derivados de furgonetas, turismos y pick up siendo un 36% del mercado.
Desde el inicio de la crisis sanitaria tanto los nuevos clientes como los clientes afianzados tienen demandas más ajustadas a sus necesidades específicas. La incertidumbre socioeconómica actual contribuye en la decisión de acceder a un vehículo concreto, haciendo que los consumidores busquen un contrato sin permanencia ni penalizaciones, por lo que las empresas y los particulares valoran la flexibilidad de un alquiler que les permita acceder a nuevas tecnologías.
El sector al completo coincide en que el concepto de propiedad que ha dominado durante años la mentalidad de la sociedad española se ha modificado, ya que actualmente poder contar con un vehículo propio no es una de las principales prioridades.
Innovaciones tecnológicas
Las diferentes flotas de renting, atienden las demandas de movilidad de los conductores con soluciones telemáticas que permiten el control desde un dispositivo móvil y en tiempo real el kilometraje privado y profesional, la ubicación del vehículo y del consumo de combustible.
Las diferentes herramientas desarrolladas permiten calcular las emisiones de CO2, la conducta al volante y las horas de conducción.
Aumento de los vehículos ecológicos
El crecimiento de la concienciación de empresas y particulares respecto al cuidado del medio ambiente ha hecho que los vehículos de energías alternativas o ecológicos tengan cada vez más una mayor importancia dentro del sector. Por lo que en los próximos años el negocio de renting seguirá avanzando mediante un crecimiento sostenible e inclusivo que busca la mejora del impacto a nivel medioambiental y el desarrollo de la digitalización.
La concienciación del ciudadano con la movilidad sostenible es mucho mayor que hace años, pero la creación de una red de infraestructuras que garantice la movilidad eléctrica sería una gran ayuda para que los vehículos ecológicos sigan creciendo.