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El estado consigue enriquecerse con los impuestos de los coches
En los últimos años en España se venden un menor número de coches, siendo los impuestos que pagan los conductores españoles por tener y mover los vehículos un número cercano a los 34.000 millones de euros. Esta cifra se sitúa por debajo de la media de Europa, recaudando en el país alemán casi 90.000 millones, 73.000 millones en Francia y 76.000 millones en Italia.
Ver todas las ofertas de renting disponiblesLos datos de la patronal de fabricantes europeos, indican que en el conjunto de la Unión Europea se venden 282 millones de vehículos, generando más de 374.000 millones de euros, de los que la gran parte son por impuesto sobre combustibles.
Cada ciudadano paga de media anualmente en España, 1150 euros por vehículo, por impuestos anuales, directos e indirectos, en Alemania se pagan de media 1.765 de media y en Bélgica cerca de 3.000 euros anuales por vehículo, el lugar donde más impuestos se pagan en Europa.
Impuestos del automóvil en España
El IVA para coches tiene en España una tasa del 21% desde 2012, desde diferentes sectores del automóvil se exige remodelar la tasa de impuestos establecidas para los coches eléctricos o de cero emisiones proporcionando así su crecimiento y sus ventas anuales. Los coches de segunda mano que son vendidos en el concesionario, también pagan el impuesto de valor añadido (IVA). En el caso del Impuesto de Matriculación el Estado genera alrededor de 300 millones de euros al año que se estructura según las emisiones de los vehículos.
Los automóviles que emiten menos de 120 g/km de CO2 son coches exentos de pagar el impuesto de matriculación siendo más del 70% de los turismos matriculados en España. En el caso de diferentes comunidades autónomos como es el caso de: Baleares, Asturias, Cantabria, Andalucía, Murcia, Valencia, Extremadura y Cataluña aplican tasas específicas en algunos tramos concretos de emisiones que hace que en algunas comunidades sea más asequible matricular determinados vehículos.
La Tasa de registro, se aplica a todos los vehículos a motor salvo a las motocicletas siendo un precio fijo: 97,80 euros, siendo de 27,30 para los vehículos de dos ruedas. Otro de los impuestos es el llamado «impuesto de circulación» que emiten los ayuntamientos en el lugar que tengas registrado tu coche.
Impuesto del valor añadido (IVA)
El Impuesto del valor añadido (IVA) se aplica en el momento de compra de un coche nuevo, pero en el caso de los vehículos de segunda mano existen dos posibilidades:
. Si lo vende una empresa, un autónomo que se dedica a la venta de vehículos usados o si se dedujo el impuesto de valor añadido al adquirir el vehículo, hay que pagar el 21% de IVA.
. Si la venta la hace un particular, está exenta de IVA, pero sujeta al Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP).
Impuesto de circulación
El impuesto de Matriculación solo se paga una vez a lo largo de la vida del vehículo, la primera vez que se matricule en España, por lo que es aplicado a vehículos nuevos o a vehículos importados que se vayan a matricular en España.
Es el impuesto que mayor número de veces se debe pagar ya que se debe abonar cada año durante toda la vida útil del coche. Aunque todo el mundo lo conoce como impuesto de circulación, la denominación oficial es la de impuesto sobre vehículos de tracción mecánica (IVTM). Es una tasa que permite que los vehículos que la abonan puedan circular por las vías públicas, si se decide no pagar ese tributo el coche no puede moverse por las calles de la ciudad. Se trata de una tasa que permite a los vehículos que la abonan circular por las vías públicas. Si no se paga ese tributo, el coche no podrá moverse por las calles.
Se trata de un impuesto municipal, ya que la recaudación se realiza en la localidad en la que esté domiciliado el vehículo, con una periodicidad anual y regido por la Ley Reguladora de Haciendas Locales. Por lo que las corporaciones locales tienen capacidad para variar la cantidad del porcentaje que crece según la potencia del vehículo. Existen algunas exenciones como ocurre con los vehículos de servicio público como coches de autoescuela, transporte de pasajeros, vehículos para personas con movilidad reducida y ambulancias que no pagan el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica.
ITP o Impuesto de Transmisión Patrimonial
Este impuesto grava entre el 4% y el 8% sobre el importe del coche. En algunas comunidades autónomas el Impuesto de Transmisión Patrimonial (ITP) no se cobra si el vehículo tiene más de diez años y un valor inferior a una cifra establecida por cada Comunidad. Para calcular este impuesto es importante consultar e informarse sobre el valor fiscal del vehículo que se puede encontrar en las tablas de valoración de hacienda.
Este tributo aplica en tres casos: las transmisiones patrimoniales onerosas, las operaciones societarias y los actos jurídicos documentados. En otras palabras, expresado de manera mucho más sencilla, el impuesto de transmisiones patrimoniales es un impuesto que impone una contribución a la acción de comprar un vehículo o vivienda de segunda mano y también el alquiler; la ampliación o reducción de capital en las empresas, así como los actos jurídicos, como la escritura pública de compraventa de una vivienda o la escritura de formalización de una hipoteca.
Al momento de comprar o vender un vehículo usado entre particulares es muy normal escuchar acerca del impuesto de transmisiones patrimoniales, el cual se trata de un impuesto o contribución que se debe de pagar a la hora de realizar la compra-venta del coche. El impuesto de transmisiones patrimoniales del coche se refiere a los impuestos indirectos que grava el aumento del patrimonio luego de una compraventa. Este impuesto representa una de las modalidades del impuesto de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados (ITPAJD).
Para pagar el impuesto de transmisiones patrimoniales de un coche de segunda mano, es preciso que se conozca la manera efectiva de realizar el cálculo del importe justo y los diferentes factores a tomar en cuenta en todo este proceso, como lo es el tipo de auto, antigüedad, y la comunidad autónoma en cuestión.
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